Tras las arduas negociaciones y el rechazo de Bulgaria de participar, la Federación Rusa y Serbia acuerdan la construcción de un nuevo gaseoducto desde Rusia hasta la ex-república yugoslava. El gaseoducto "South Stream" esquivará en su recorrido a Ucrania.
Ya es oficial. Hace unos días parecía que Serbia no iba a ceder a la presión rusa pero al final el gobierno serbio ha manifestado su intención de colaborar con Rusia en el proyecto. Decía el pasado 9 de Junio el primer ministro Serbio, Aleksandr Vucic "en lo que respecta a Serbia, el proyecto sigue según lo planificado. Si hay cambios el gobierno decidirá e informará al respecto."
El gaseoducto surtirá a Europa del gas ruso de las entrañas de Siberia evitando por el sur a Ucrania y pasando por países como Grecia e Italia. Complementará con otro proyecto que ya está en marcha, el "North Stream", que esquiva a Ucrania también por el mar Báltico.
El proyecto está dirigido por iniciativa privada de monopolios como Gazprom, la conocida empresa rusa que ha cortado recientemente el suministro a Ucrania y por Eni, empresa hermana de Gazprom pero italiana y vinculada a Europa occidental. En un futuro, ambas empresas unirán varios gaseoductos que pasarán por Serbia, Hungría, Eslovenia y Austria.
Destacamos la importancia del monopolio del gas en Europa del este que abastece a una gran parte de europa occidental, dependiendo del grifo ruso. Rusia busca su propia esfera imperialista de influencia económica en contraposición a la esfera imperialista de la OTAN (EE.UU y U.E) en otras repúblicas ex-soviéticas una vez cerrado el suministro a Ucrania, a la vez que busca influencia y aliados con otros países eslavos de Europa.
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