Cuando el pasado martes 28 de octubre Ricardo volvía de clase, se topó con dos viejos conocidos que lanzaron el grito de guerra: “ahí va el maricón del cinco del oro”. A su intención de defenderse, la respuesta de los agresores fue “nos reímos de ti y cuando nos riamos de ti, tú te piras, maricón”. Ricardo no lo hizo y, tras un escupitajo en la cara, comenzó a recibir puñetazos e insultos homófobos en pleno centro de la localidad sevillana de Castilleja de la Cuesta.
No es la primera vez que los agresores dan una paliza a Ricardo por su condición sexual. “De pequeño ya me pegaron otra vez.”, afirma. “Lo peor de todo es sentirme humillado y que haya personas que se dediquen a obstaculizar mi felicidad”. Ahora, Ricardo tiene miedo a salir de casa, sufre pesadillas y está a base de ansiolíticos para poder dormir. “Llevo año y medio recibiendo amenazas de ellos por las redes sociales”, se lamenta.
Ricardo espera que, además de ser castigados, la gente se conciencie de la homofobia aún tan presente en colegios e institutos, en los centros de trabajo y en las calles. Para manifestar el rechazo a la agresión y concienciar del aumento de agresiones homófobas, Ricardo se ha aliado con su novio, sus amigos, asociaciones de defensa de los derechos de homosexuales y transexuales y el área LGTB de IU Andalucía para organizar una besada, delante del Ayuntamiento de Castilleja de la Cuesta, el miércoles 5 de noviembre a las 19.00 horas. “Si nos quieren en el armario, nos tendrán bien visibles”.
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